-¿Hay un solo sentimiento que no condene? Las tendencias más nobles, las simpatías más inocentes se interpretan torcidamente, se persiguen, y cuando dos almas vienen a encontrarse, las pobres, todo se confabula para que jamás puedan llegar a reunirse. Y a pesar de todo, ellas lo intentaran, agitaran las alas, se llamaran una a la otra. Y desde luego, más tarde o más temprano, después de seis meses o de diez años, eso no importa, acabaran por unirse y por amarse.
Madame Bovary. Gustave Flaubert
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